Manifiesto
El dibujo vectorial
El dibujo vectorial es básicamente una imagen gráfica creada a partir de elementos de forma geométrica (líneas, segmentos, polígonos, arcos, etc.) que han sido definidos por atributos matemáticos.
Con esta técnica conformo multitud de formas poligonales interrelacionadas entre sí y, al aplicar color en sus áreas, creo matices luminosos que nos conducen a mundos de paisajes, circunstancias y situaciones digitales. Las imágenes nos hacen sentir inmersos en un estadio donde lo físico da paso a lo intangible de la experiencia humana: la existencia, la soledad, la belleza, el progreso, la tecnología o la sociedad.
Utilizo el dibujo vectorial de manera simbiótica. El simbiosismo es una manera de entender el arte, es la integración de lenguajes artísticos que se nutre de las artes escénicas, las técnicas de ambientación, la plástica de la fotografía, las estéticas de la pintura, el lenguaje del collage, el grafismo y la ilustración así como de las reglas arquitectónicas, la proporción escultórica y el simbolismo.
En mi obra prevalece la plasticidad, que se disciplina en varios estilos con diferentes resultados. La parte abstracta habla de mí, de mis sentimientos y emociones, en ella se reflejan las angustias y exaltaciones que le confiere mi estado de ánimo en cada momento; es la parte más oculta de mi carácter. La obra figurativa sin embargo versa acerca de mis ideas, pensamientos y experiencias. En esta se recrea todo lo visto, vivido y conocido desde el punto de vista del ajeno observador.
El simbiosismo fusiona las almas de estas expresiones plástico-visuales, los sentimientos que anidan y les dan vida, para contar historias, plasmar ideas y pensamientos, y también para participar del expresionismo puro.
Desarrollo este trabajo utilizando un programa de dibujo técnico originalmente muy limitado en sus posibilidades estéticas (el mismo con el que diseño los planos y proyectos arquitectónicos), alterando sus funciones en búsqueda de composiciones complejas, plásticas y de gran carga simbólica. El resultado es para mí tanto una experiencia artística como una crónica de nuestra época.